PROTECTORA Y SANTUARIO SCOOBY EN OTOÑO
Los voluntarios de Greyhound Compassion (organización británica que colabora con Scooby) ya han regresado de su atareada visita a Scooby Medina del Campo. Los cuatro intentamos hacer lo máximo posible durante este viaje.
Desempeñamos las típicas labores de limpieza, organización, preparación de comidas... ¡y las complementamos con unas cuantas más! Hay tantos galgos bonitos y cariñosos en Scooby en estos momentos. Y se esperan muchos más a inicios de la temporada de caza (que ya ha comenzado) porque la mixomatosis en las liebres ha mutado y a consecuencia de esto, se cancelarán salidas de caza con perro y más galgos terminarán en el refugio (sin olvidar el sufrimiento de las pobres liebres).
Convencimos al comité de recaudación de fondos para que retrasara una semana el día de puertas abiertas y así poder ayudar pero no pensamos en el factor meteorológico, que jugó un gran papel en la asistencia... Parece que la mentalidad de “llueva o haga sol” es más cosa británica. El día de puertas abiertas hizo fresco y las lluvias amenazaban, pero aún así, un grupo de dedicados socios españoles acudió para hacer un “tour” por el refugio y tomar unos refrescos.
Los voluntarios británicos tuvieron la idea de organizar un “lucky dip” para los niños (juego en el que pruebas tu suerte y sacas regalos envueltos de un cesto o similar) y un juego de habilidad y pulso para los adolescentes.
Por desgracia, cuando los niños se dirigían hacia el “lucky dip” alguien soltó a unos cachorros recientemente rescatados y los niños prefirieron jugar con media docena de adorables cachorros
¿¡Quién puede competir con ellos!? Logramos recaudar unos euros para el refugio, pero es difícil evitar pensar que las cosas hubiesen salido de otra manera si no hubiésemos interferido con los organizadores y el día de puertas abiertas hubiese tenido lugar una semana antes cuando hacía sol aún.
Pero bueno, al menos sirvió para mostrar a los animales de Scooby y el duro trabajo que allí se desempeña.
Esa misma semana, tuvo lugar la última de varias visitas a un hombre que acumulaba perros, y se rescataron muchos que se encontraban en una situación de negligencia.
Nos complació mucho ver que se ha comenzado a reponer la verja dilapidada que recorre la parte más antigua del refugio (unos 800m alrededor de los pasillos 7 y 8).
Estas reparaciones mejorarán las condiciones de los galgos del refugio y les proporcionará luz natural y aire fresco en los exteriores de sus cheniles. A la vez, no podrán ver a través de unos cheniles y otros y así se evitarán provocaciones entre ellos o que se fuguen para visitar a los “vecinos” ¡o darse una vuelta por el refugio!
Gracias a todos los donantes que ayudaron a hacer posibles estos tan necesarios arreglos.
Lanzamos esta campaña en enero del 2018 pidiendo 20.000 €, alcanzamos nuestro objetivo en septiembre y se comenzaron las reparaciones en octubre.
Los fondos se recaudaron gracias a Greyhound Compassion, Galgos Greys and More (Suiza y Alemania), los corredores de la media maratón de Medina del Campo y voluntarias creativas holandesas y sus subastas online, así como a donantes privados.
¡Gracias!
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BUILDING WORK
BUILDING WORK
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La Protectora y Santuario Scooby recibe y se beneficia de las visitas de muchos voluntarios, pero nos hemos dado cuenta de que hay ciertas reglas que parecen “perderse por el camino” con la mensajería instantánea y las comunicaciones interactivas.
Por ello, ayudamos a la grabación de un vídeo sobre el refugio para recordar a los voluntarios que se debe respetar Scooby como el hogar que es para muchos animales y para mostrar el valor que pueden aportar mientras trabajan en el refugio.
El vídeo transmite el mensaje bien claro, aunque tuvimos que grabar muchas tomas hasta que lo conseguimos.
Tuvimos que lidiar con cachorritos “atormentando” a sus mayores mientras limpiábamos los cheniles, galgos metiendo las narices (literalmente!) en la cámara, el tiempo, un guión un poco pobre, unas aptitudes más bien escasas en el uso del palo del selfie...
Menos mal que otra voluntaria tomó las riendas del palo. Lo importante es que el producto final hará su labor sin duda ¡y que nos lo pasamos en grande haciéndolo!
